Son muchos y muy variados los embajadores de Puerto Vallarta, pero pregúntenme si alguno lo ha sido en realidad, la respuesta es no. Y no por que sus agendas se lo prohiban, simplemente porque no les da la gana.
CHECO PÉREZ, ¡WOW!
Ayer presentó una iniciativa la regidora Carla Helena Castro López para que el piloto mexicano, Checo Pérez sea nombrado embajador honorífico de Puerto Vallarta, la iniciativa dejó impactados a los presentes.
EL ARGUMENTO
Solicitó la regidora Carla Castro nombrar Embajador Vallartense al piloto Checo Pérez con el argumento de que “debemos aprovechar a las grandes personalidades que tienen los ojos del mundo puestos en ellos, ya que nos pondrá de manera natural en boca de todos sus seguidores”
Una vez que acepte y ponga fecha se llevará a cabo el evento protocolario donde se le entregaría un pergamino que asiente dicho acuerdo, firmado por los integrantes del Ayuntamiento y una réplica de la llave de la ciudad.
“EL CANELO”
Antes ya se hizo lo propio con Saúl “El Canelo” Álvarez, pero nunca vino a recoger ni las llaves de la ciudad, pensando en que podría ser un buen proyector para captar turismo nacional e internacional.
EL CHARRO Y UN PIANISTA
Lo mismo sucedió cuando el presidente nombró a dos figuras de tamaño internacional, como Alejandro Fernández y el pianista Raúl di Blasio, a ellos les dio la encomienda de llevar a Puerto Vallarta por el mundo. Pregúntenme cuantos turistas vinieron gracias a su “publicidad”, ninguno es mi respuesta.
APROVECHANDO QUE
Checo Pérez vive en Jalisco, pero también Alejandro Fernández, es más tiene una casa en Bahía de Banderas y es muy amigo de los de “Maná”, que también tienen su domicilio en el puerto.
Tampoco rindió frutos Raúl di Blasio que se paseó todo lo que quiso a expensas de las arcas de Puerto Vallarta y le cumplieron un capricho de colocar en plena bahía un costoso piano.
Es más, a Puerto Vallarta le compuso una melodía que ve tú a saber que está entre su repertorio y si la toca.
JUAN GABRIEL, ESE SÍ VALIÓ
Cuando menos el “Divo de Juárez”, Juan Gabriel le compuso una canción a Pueto Vallarta que en voz de Rocío Dúrcal se hizo famosa, y no anduvo pidiendo chichi a los gobiernos en su momento.
Es más, cuando Gustavo González Villaseñor trajo a Juan Gabriel, fue en un espectáculo que costo cero pesos y cero centavos a Puerto Vallarta, porque hasta las noches de hotel se le regalaron, como parte del homenaje