Alejandro Arcos, del PRI, había tomado posesión el lunes como presidente municipal de la capital de Guerrero, uno de los Estados de México más pobres y azotados por la violencia. Este jueves fue asesinado también el secretario del Ayuntamiento
Al sexto día de estar en funciones, esta tarde fue asesinado y decapitado el alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, confirmó la Fiscalía General del Estado (FGE).
Su cadáver fue abandonado en un vehículo en la colonia Villas del Roble, ubicado al oriente de la ciudad.
Arcos Catalán apenas rindió protesta como alcalde de la capital de Guerrero el pasado 30 de septiembre, día en que fueron renovados todos los ayuntamientos del estado.
El jueves 3 de octubre asesinaron a uno de sus colaboradores más cercanos, el secretario general del Ayuntamiento de Chilpancingo, Francisco Gonzalo Tapia Gutiérrez, en una calle del centro de la ciudad, y a unos días de que tomara protesta, el 28 de septiembre, asesinaron a quien se sabía sería su secretario de Seguridad Pública, Ulises Hernández Martínez.
Fiscalía confirma asesinato
Desde las 18:43 de la tarde se conoció del reporte de un cadáver decapitado en la colonia Villas del Roble –que habrían abandonado desde antes– y comenzó a circular la fotografía de una cabeza humana cercenada sobre la cabina de una camioneta, que guardaba parecido con el alcalde, pero el silencio de las autoridades locales propició la especulación y, a la vez, exponía que algo había ocurrido.
Pasaron al menos unas dos horas y media para que su asesinato fuera confirmado por la FGE.