· En el IMSS se brinda a las y los adolescentes orientación en materia de salud sexual y reproductiva, a través de médicos familiares o personal de enfermería en los Módulos PrevenIMSS.
Tan solo en 2021 en México se registraron alrededor de 340 mil embarazos en mujeres menores de 19 años; y en zonas rurales más del 30% de los adolescentes no usan ningún método anticonceptivo durante su primera relación sexual.
Debido a que el embarazo adolescente representa un mayor riesgo de complicaciones médicas en comparación con los que se presentan en mujeres mayores de 20 años, y que en muchas ocasiones se generan, por problemas de índole familiar, social, educativa, etc., se llevan a cabo acciones para prevenir la gestación en esta etapa de la vida.
El médico epidemiólogo de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 79 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, Juan José Atilano García, informó que de acuerdo a cifras del Gobierno Federal, en México se registraron alrededor de 340 mil embarazos en mujeres menores de 19 años tan solo en 2021. La incidencia es más alta en zonas rurales y se reporta que más del 30% de los adolescentes no usan ningún método anticonceptivo durante su primera relación sexual.
“La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera el embarazo adolescente como gestación de riesgo por las repercusiones que puede causar tanto en la salud de la madre como en la del recién nacido. Además, esta situación suele acarrear barreras sociales que limitan la formación académica y las metas personales de la adolescente y de su red de apoyo”, aseveró.
En el marco del Día Nacional para la Prevención del Embarazo No Planificado en Adolescentes (26 de septiembre), el especialista recordó que el riesgo de complicaciones es el doble en mujeres de entre 15 y 19 años y hasta cuatro veces mayor en menores de 15 años, en comparación con las mujeres mayores de 20 años.
Precisó que en el IMSS se brinda a las y los adolescentes orientación en materia de salud sexual y reproductiva a través de médicos familiares o personal de enfermería en los Módulos PrevenIMSS, por lo que invitó a los jóvenes a solicitar estos servicios.
“Es fundamental eliminar el estigma en torno a estos temas. La educación sexual no equivale a otorgar ‘permisos’, sino a reconocer una realidad y acompañar a las y los adolescentes con información y apoyos que les permitan proteger su salud y su futuro”, concluyó.